Reflexología Podal

Cada parte del organismo, se refleja en una zona del pie. Actuando sobre esa zona se actúa sobre el órgano reflejado

La Técnica

Es una terapia basada en masajear los pies, al existir zonas de todo nuestro organismo reflejadas en la plantas de nuestros pies. Al actual sobre la planta del pie se actúa sobre la zona en él reflejada.

Esta técnica curativa alternativa permite actuar sobre un síntoma determinado o aliviar un dolor, pero también regular, en profundidad la función de un órgano enfermo, mejorar la circulación corporal, favorecer la eliminación de los desechos y las toxinas y estimular la energía del organismo a fin de evitar nuevos desequilibrios.

La Reflexología Podal es a la vez un arte, una técnica precisa, y una ciencia, ya que sus bases son fisiológicas y neurológicas.
Conviene saber que el término “Reflexología” no se toma en el sentido etimológico de la palabra “reflexo”, que al diccionario define como una “contracción muscular involuntaria provocada por un estimulo externo”, sino como una acción a distancia sobre los órganos o tejidos a través de la estimulación refleja de los pies.

Ciertos puntos de los pies reflejan tensiones, dolores, enfermedades o bloqueos relacionados con diversos órganos. Con el masaje o la presión de estos puntos, se dispersa la retención de la energía responsable del desequilibrio. A veces, se perciben pequeñas estructuras cristalinas bajo los dedos que indican la existencia de un trastorno a este nivel y constituyen una indicación terapéutica muy valiosa.

Mediante la Reflexología, se actúa sobre el conjunto de los sistemas orgánicos, circulación sanguínea, sistema linfático, endocrino, neurológico y óseo, articular y así se trata a distancia (desde los pies) el órgano enfermo.
Aunque existen otras zonas donde se reflejan los distintos órganos, manos y orejas (auricoloterapia), es el pie el instrumento principal de la Reflexología por su facilidad de acceso y por el bienestar que su masaje proporciona.